Causas

¿Por qué a mí? ¿He hecho algo mal? ¿podía haberlo evitado?

Es la pregunta que muchas familias se plantean cuando reciben la noticia. Es importante borrar los sentimientos de culpa, porque, en más del 90% de los casos, no encontraremos ninguna causa conocida. 

Sólo en casos concretos se trata de la interacción de algunos genes «susceptibles» (algunos conocidos, pero en su mayoría aún un misterio), con factores medioambientales.

Se han identificado algunos de estos factores externos como causantes aunque, una vez más, en la mayor parte de los casos no se evidencia ninguna de estas causas en la historia clínica.

Aproximadamente el 10% de las FLP vienen asociadas a otras enfermedades o síndromes. Se han descrito más de doscientos síndromes que pueden presentar FLP en su espectro clínico.

Es por ello, que consideramos importante un adecuado asesoramiento genético a las familias para resolver las dudas que puedan plantearse en base a futuros embarazos o en próximas generaciones.

Agentes Externos

Además de los factores genéticos que aumentan el riesgo de padecer FLP, las fisuras faciales se han relacionado con el contacto con determinados agentes teratogénicos durante el embarazo:

FÁRMACOS
  •  Antiepilépticos: Fenitoína, Valproato, Topiramato o el Metotrexato, son algunos fármacos comúnmente utilizados en el tratamiento de la epilepsia. Aunque aumenta el riesgo relativo de FLP, el riesgo absoluto sigue siendo bajo.
  • Corticoides: la asociación de la FLP y los corticoides no es tan clara, y aunque no se puede excluir una posible asociación, no está claramente demostrada.
  • Diazepam: Aunque la asociación en ratones ha sido confirmada, no ha llegado a demostrarse en el ser humano.
DÉFICIT DE ÁCIDO FÓLICO

El ácido fólico es esencial en la metilación del DNA y su déficit se ha relacionado con diferentes defectos. Los más comunes son los defectos del cierre de tubo neural y algunas malformaciones cardiacas. Aunque hace unos años se popularizó la asociación con las fisuras faciales, en la actualidad su relación directa no está demostrada. Sin embargo, el uso de polivitamínicos durante el embarazo, sí parece un factor prtoector frente a la FLP.

ALCOHOL

El consumo de más de cinco bebidas alcohólicas en una sóla sesión semanal se ha relacionado con un aumento del riesgo de FLP. Al parecer, el etanol podría ocasionar la alteración de la membrana celular y de determinadas enzimas que ocasionaran el cuadro clínico.

TABACO

El tabaquismo materno aumenta el riesgo de fisuras faciales. La teratogénesis se ha relacionado con la hipoxia (menor concentración de oxígeno en tejidos), así como con un componente del tabaco, el Cadmio.

OBESIDAD

La obesidad materna tiene un riesgo bajo, pero confirmado, de determinadas deformidades, entre ellas, la FLP.

Fuente: SOCEFF